“Caridad es dar lo que te sobra y que otros, seguramente, necesitan. Solidaridad es compartir lo que tienes con otros que no lo tienen.”
Solidaridad para compartir con las personas que más nos necesitan todo aquello que podemos ofrecer. Solidaridad con los menos afortunados de Guinea Bissau, es decir, los niños y las mujeres, los más pobres entre los pobres, porque consideramos que ayudarles es asentar las bases de un futuro más sólido e igualitario para todos.
Respeto por una cultura que no es la nuestra. Respeto para no imponer una manera occidental o europea de ver el mundo. Respeto para sus costumbres, sus creencias, su lengua, su tradición… pero siempre que se respeten los derechos humanos.
Igualdad entre hombres y mujeres, entre niños y niñas, pero también entre aquellas personas que sufren una discapacidad, una enfermedad, o cualquier otro problema social o físico. Igualdad como base para conseguir la dignidad humana que todos ellos se merecen y por la que trabajamos diariamente.
Compromiso con las personas a las que van dirigidos nuestros proyectos, con nuestra contraparte, con la comunidad, con los niños a los que ayudamos a crecer en todos los sentidos… para que siempre cuenten con nosotros, para que sepan que siempre intentaremos estar a su lado. Pero también compromiso con las personas que nos ayudan y nos apoyan, porque deseamos que vean el fruto de sus aportaciones de manera transparente y cercana.
Coherencia en nuestros proyectos y también en los resultados que buscamos y conseguimos. Coherencia en nuestra manera de crecer pero también a la hora de gestionar.
Cooperación con las distintas organizaciones que comparten nuestros valores, cooperación para sumar, para apoyar, en definitiva, para conseguir el bien común de las personas que ayudamos.
Futuro, porque nuestros proyectos no sólo pretenden atender las necesidades puntuales e inminentes, sino que queremos construir unas bases sólidas para conseguir un futuro más acogedor para todos.